Que la Nochebuena y la Navidad sea una fiesta para todos tus seres queridos...incluído TU MEJOR AMIGO!!!
Lo primero que debemos saber es que los perros tienen una sensibilidad cuatro veces mayor a la del ser humano. En ellos se produce un fenómeno de miedo o fobia difícil de controlar cuando están expuestos a ruidos tan fuertes.
Si nuestra mascota se altera ante esta situación, lo mejor es no acariciarlo ya que lo pueden interpretar como una gratificación a su comportamiento y esto no será positivo. Tampoco debemos castigarlo ya que incrementará su estado de alteración.
Entre las opciones muchas veces se recomiendan tratamientos de contra-sensibilización. Estos tratamientos los realizan veterinarios con experiencia en comportamiento animal. Lo que se busca con esta técnica es generar el ruido en forma frecuente a cierta distancia y luego ir haciéndolo a menor distancia para que el animal se vaya acostumbrando. También pueden utilizarse grabaciones para reproducir el fenómeno.
También suelen utilizarse sedantes que deben aplicarse siempre bajo prescripción médica veterinaria y de ser posible ajustar la dosis con antelación a las fiestas para encontrar la dosis adecuada, tomando en cuenta que las respuestas terapéuticas son irregulares en los distintos animales.
Tips útiles para reforzar los cuidados en esta época.
Recordá ponerle la medalla de identificación: si se llegaran a extraviar, podrán contar con una valiosa ayuda para reubicarlas junto a sus dueños.
Dejalos en espacios amplios: lejos de elementos que puedan lastimarlos.
Música tranquila: podes dejarlo en una habitación con música tranquila o la radio encendida.
Tapones para los oídos: algunas veces colocarles tapones en los oídos disminuye un poco la percepción de los ruidos.